Amigas y amigos:
La Comunidad de Madrid, ya nos tiene acostumbrados a que todos los años incluye en la Ley de Acompañamiento de Presupuestos un tajo al marco jurídico del Planeamiento Urbano o a la desprotección de sus valores ambientales, pues este año no parece ser distinto.
El gobierno de la Comunidad de Madrid de nuevo considera que los intereses de los propietarios prevalecen sobre el bien común y tras la polémica Ley VIRUS, añade un nuevo ataque a las políticas de protección de los espacios naturales, fundamentales para asegurar la calidad de las condiciones ambientales de nuestra comunidad.
Aunque a muchos no les pueda parecer, la reducción de la protección de los espacios ambientales es una expropiación del bien común, ya que son una pieza indispensable para el mantenimiento del medio ambiente global y la fuente de su prosperidad. La calidad ambiental proviene de mantenimiento de los ciclos ecológicos y la condiciones del entorno en que se enclavan, que por sus propia naturaleza no pueden ser apropiables.
Cada reducción en la protección de un recurso ambiental supone una expropiación del bien común y por tanto una pérdida en la riqueza colectiva que nos pertenece por nuestra condición de ciudadano. Tanto da que se proponga imponer multas abusivas por ejercer el derecho a la libre expresión o que se reduzca la protección de los espacios de valor ambiental, ambas son caras de la misma moneda: La reducción de nuestros derechos ciudadanos y una perdida de la construcción y conservación de nuestros territorios naturales, ciudadanos o políticos.
Por todo lo anterior os animo a firmar la campaña que ha convocado Ecologístas en Acción
El gobierno de la Comunidad de Madrid de nuevo considera que los intereses de los propietarios prevalecen sobre el bien común y tras la polémica Ley VIRUS, añade un nuevo ataque a las políticas de protección de los espacios naturales, fundamentales para asegurar la calidad de las condiciones ambientales de nuestra comunidad.
Aunque a muchos no les pueda parecer, la reducción de la protección de los espacios ambientales es una expropiación del bien común, ya que son una pieza indispensable para el mantenimiento del medio ambiente global y la fuente de su prosperidad. La calidad ambiental proviene de mantenimiento de los ciclos ecológicos y la condiciones del entorno en que se enclavan, que por sus propia naturaleza no pueden ser apropiables.
Cada reducción en la protección de un recurso ambiental supone una expropiación del bien común y por tanto una pérdida en la riqueza colectiva que nos pertenece por nuestra condición de ciudadano. Tanto da que se proponga imponer multas abusivas por ejercer el derecho a la libre expresión o que se reduzca la protección de los espacios de valor ambiental, ambas son caras de la misma moneda: La reducción de nuestros derechos ciudadanos y una perdida de la construcción y conservación de nuestros territorios naturales, ciudadanos o políticos.
Por todo lo anterior os animo a firmar la campaña que ha convocado Ecologístas en Acción
Enlace para que firmeis contra la Ley de Medidas Fiscales de este año.
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